La violencia con armas de fuego es una enfermedad biopsicosocial compleja y, como tal, requiere un enfoque multidisciplinario para la comprensión y el tratamiento.
Enmarcar la violencia con armas de fuego como una enfermedad la coloca firmemente en la práctica médica y de salud pública. Al aplicar el modelo de enfermedad a la violencia con armas de fuego, es posible explorar el huésped, el agente y el entorno en el que se produce la violencia con armas de fuego, e identificar los factores de riesgo a los que se debe apuntar para la prevención. Este enfoque también brinda la oportunidad de abordar suposiciones científicamente inexactas sobre la violencia con armas de fuego.
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Imagen por jarmoluk de pixabay.com
Además, hay muchas oportunidades para que las comunidades médicas traten la violencia con armas de fuego como una enfermedad al considerar y tratar los aspectos biológicos, de comportamiento y sociales de esta enfermedad. La comunidad médica debe responder a las llamadas recientes para participar en la prevención de la violencia con armas de fuego, y emplear este modelo de violencia con armas de fuego como una enfermedad biopsicosocial proporciona un marco para la participación.